Pero hace tanto calor. Este tiempo es demasiado. Hay mujeres en la iglesia. Tengo un buen apartamento. Podemos tomarnos una copa, conversar. Escucha, viste mi anuncio y llamaste. Debes estar interesada. La piscina reflejaba las luces. La puerta se abrió y allí estaba el señor Lighthill.
Las palabras no son suficientes para describir mi amor por ti. Saber que encabeza la lista de las mejores cosas que me han sucedido. Dejar de pensar en ti es algo que nunca puede suceder. Hace un tiempo, caí en mi propio psicólogo pidiendo lo mismo que pedimos todos. Que no me duela.
No vive sin ola y caracol, sin los besos salobres, sin besos marineros, sin la sangre en función de mar y sol. Este sol es muy frío para un amor que tiene costumbre de alcatraz. Le digo adiós. No vive de néctar y resinas el amor que es oriundo del alga y de la sal. Tengo celos de ti, por qué negarlo, tengo celos de ti, celos rabiosos, celos de la sonrisa de tu boca, celos de las miradas de tus ojos, cuando yo no te oigo. Cuando yo no te miro. Cuando no estoy delante. Que unas veces parecen que acarician y otras parece que desnudan.
Porque mueve el universo para ser posible. La razón por la cual el amor es tan motivador. Hay un encanto sobre lo prohibido que hace que sea indescriptiblemente deseable. No es suficiente soñar con el amor imposible, es necesario conquistarlo también.