Veréis, mi mujer Concha y yo teníamos y tenemos una vida sexual muy activa. Follamos como conejos, hasta que nos duelen los genitales de tanto follar Yo soy un tío normalito, de alto, y la vida sedentaria que llevo ha hecho estragos en mi barriga cervecera Excepto en mi pene. Sigue teniendo vida propia, y tiene la misma energía que cuando me casé, va ya para veinte años. Por su parte mi mujer no es de las que aquí se describen.
Laura querida, si es que esto es un mal universal. Pues no estoy de acuerdo con lo que decís. Esos especímenes hoy por hoy no existen y vosotras debéis ser las excepciones que confirman la regla. Sólo tenéis que meteros en cualquier web de citas haciéndoos pasar por hombre y ver que el 90 y tantos por ciento de las mujeres ponen que quieren algo serio o bien que no quieren nada de rollos de una noche. Lo que no saben o lo saben y se hacen los tontos, es que nosotras no aguantamos a esos especímenes ni de lejos. He dicho. Acertiva total.
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Hola Valentina como estas todos los dias veo tu perfil y te deseo apenas viaje a Bogota voy a buscarte y que me cojas asi como a Ivan eso seve delicioso y tengo que probar esa delicia cojes muy RICO cuando me cojas quiero que me hagas venir a chorros mamasita y respecto my opinion ivan lo felicito eres un verraco ser pasivo tambien es de hombres y vuelva a buscarla para que termine el video cuando valen te hecha esa rica leche en tu Boca yo voy a buscarla un besito mami. Metiendome esa rica verga. Opinen que les pareció mi primera ves con esa mamacita venezolana. Besitos Valentina mi amor delicioso la pasé contigo. Hace días había visto su perfil sus publicaciones de vídeos y fotos y estaba antojado de esa verga que tiene. Y aunque creas que mostrarte transparente y sincero puede ser una virtud, si te pasas de frenada tu interlocutor puede llevarse una mala percepción. Este es precisamete el primer error que los expertos en protocolo y en sociabilidad ven en muchos primeros contactos: compartir demasiado sobre tu vida o lo que piensas. En general, hablar mucho y escuchar poco.